El apóstol Pablo y sus viajes misioneros
¿Quién era Pablo? ¿Cuál era su nacionalidad? ¿De qué manera la influencia Pablo facilito la predicación del evangelio? ¿Se ha preguntado usted, por qué Jesús escogió a Pablo como apóstol? ¿Excesivamente calificado? ¿Cómo pude alguien llegar a ser un misionero excepcional? ¿Cuál es el secreto para obtener la victoria? (Hechos 9:1-9; 22:25-29; Romanos 7:19-25; 11:1; Filipenses 3:5; 2 Pedro 1:3-8).
“Tengo, pues, de qué gloriarme en Cristo Jesús en lo que a Dios se refiere” (Romanos 15:17)
El apóstol Pablo tuvo un impacto poderoso sobre el mundo de ese entonces, al difundir el cristianismo más allá de los confines geográficos de Israel y del pueblo judío. Su vida y su ministerio son un modelo para nuestra misión en nuestros días.
· Pablo fue especialmente elegido y equipado para un ministerio especial.
· Usar los dones y los talentos que Dios nos ha dado para su servicio.
· Que cada uno tome la decisión de preparar un programa de discipulado para nuestra propia vida, disponiendo tiempo para desarrollar y usar los dones y los talentos dados por Dios.
I. LOS ANTECEDENTES DE PABLO
· ¿Sabes algo…? ¿Quién era Pablo? ¿Cuáles son los antecedentes de Pablo? ¿Qué aspectos de tu vida (nacionalidad, educación, crianza) pueden servirte en forma especial al testificar? ¿Cómo puedes aprovechar tu trasfondo para testificar mejor por el Señor?
1. El nombre de Pablo
· La palabra griega Páulos; del latín Paulus, un nombre romano que significa "pequeño".
· El gran apóstol a los gentiles.
· En la Biblia se lo presenta como Saulo, del griego Sáulos, del hebreo Shâzûl, "pedido [a Dios]", o "prestado [a Dios]"; Hech. 7:58) y se lo menciona por ese nombre en la narración de Hechos (hasta Hech. 13:9).
· Ha habido bastante especulación acerca de por qué en medio de Hechos se comienza a llamar Pablo a Saulo, y de allí en adelante sólo se lo nombra como Pablo, excepto el relato que él mismo hace de su conversión (Hech. 22:7, 13; 26:14).
· Una respuesta sencilla y plausible sería que él, como otros (Hech. 1:23; 13:1; Col. 4:1 1), tuviera más de un nombre: un nombre hebreo, Saulo, y un nombre romano grecizado, Páulos o Pablo. Quizás usara el nombre hebreo en su hogar y en sus contactos con los judíos, pero su nombre greco-romano estaría en armonía con la influencia y el ambiente helenísticos de la ciudad donde nació, y con su envidiable estatus de ciudadano romano.
· Más tarde, cuando comenzó su obra entre los gentiles, era ventajoso para él que se lo conociera como Pablo. Es digno de notar que hasta Hech. 13 se menciona a Pablo sólo en relación con su contacto con los judíos. Pero en ese capítulo comienzan sus actividades entre los gentiles, como también el uso de su nombre gentil, Pablo.
· Pablo fue hebreo por nacimiento, educación y sentimientos; tal es así que, a pesar de sus contactos tempranos con la cultura y las filosofías griega y romana, se pudo llamar "hebreo de hebreos" (Filp. 3:5).
· Era de la tribu de Benjamín (Rom. 11:1), y tal vez le pusieron el nombre por Saúl, el primer rey de Israel, quien también era benjamita (1 Sam. 9:1, 2; Hech. 13:21).
· Poco se sabe de su familia. Su padre era un ciudadano romano (Hech. 22:28), y quizá fariseo (Hech. 23:6).
· No se sabe cómo el padre obtuvo su ciudadanía romana, pero había ciertos procedimientos mediante los cuales un destacado judío podía llegar a ser ciudadano romano. Presumiendo que la lograra de esa manera, entonces podemos suponer que Pablo procedía de una familia de cierta importancia. Tenía por lo menos una hermana (Hech. 23:16).
· En Rom. 16:7, 21 se refiere a varios hombres como sus "parientes", pero este término (del griego sunguenes) puede significar sencillamente "conciudadano", de modo que no es seguro si realmente hace referencia a parientes de sangre. Pablo pudo haber sido desheredado por su familia cuando se convirtió al cristianismo (Filp. 3:8), pero si fue así, no lo menciona.
· Pablo nació en el Asia Menor, en la próspera metrópolis de Tarso (Hech. 21:39; una ciudad notable por su filosofía, ciencia, educación y cultura; una cultura donde se mezclaban elementos griegos, romanos y judíos.
· La fecha de su nacimiento no se puede determinar con precisión. De acuerdo con una tradición del siglo II d.C., la familia de Pablo había vivido originalmente en Giscala de Galilea, pero la ciudad fue capturada por los romanos y los miembros de su familia llevados como esclavos a Tarso el año 4 a.C., donde más tarde obtuvieron su libertad y la ciudadanía romana.
· Si es así, Pablo nació después de esos acontecimientos, porque era romano de nacimiento (Hech. 22:28). Cuando aparece por 1a vez (Hech. 7:58) se lo califica como "un joven" (griego neanías). Sin embargo, este término, que se usaba para hombres que tuvieran entre 20 y 40 años de edad, poca ayuda nos ofrece para determinar la edad de Pablo.
2. La Educación de Pablo
· Probablemente Pablo asistiera a una escuela en relación con la sinagoga de Tarso. En esta ciudad políglota aprendió no sólo el hebreo y la lengua que hablaba su pueblo, el arameo (Hech. 21:40; 22:2), sino también el griego (Hech. 21:37) y tal vez el latín.
· También aprendió a hacer carpas o tiendas, quizá de su padre, con lo que más tarde se pudo sostener (Hech. 18:1, 3; 20:34; 1 Cor. 4:12; 1 Tes. 2:9; 2 Tes. 3:8).
· Siendo joven fue a Jerusalén (Hech. 26:4) y se sentó a los pies del rabino y fariseo más renombrado de sus días: Gamaliel (Hech. 22:3; 5:34). Bajo su instrucción, Pablo fue enseñado "estrictamente conforme a la ley de nuestros padres" (Hech. 22:3; 24:14), y como resultado vivió "conforme a la más rigurosa secta de nuestra religión": los fariseos (Hech. 26:5).
· Fue un estudiante tan brillante y un defensor tan ardiente de las doctrinas y tradiciones del judaísmo que aventajaba a muchos de sus pares en el aprendizaje y el celo (Gál. 1:14); y en su odio fanático por los cristianos aventajó por lo menos a su maestro (Hech. 8:3; 9:1; 5:34-39).
· Puede haber poca duda de que los líderes de la nación judía esperaban grandes realizaciones de él.
3. Apariencia personal y salud de Pablo
· Parecería que, aunque Pablo impresionaba intelectualmente, físicamente no se destacaba.
· Sus enemigos dijeron de él que su "presencia corporal [era] débil, y la palabra menospreciable" (2 Cor. 10:10).
· La tradición lo describe como un hombre bajo, un tanto jorobado y de piernas encorvadas ("chueco"). Parece haber sufrido de algún tipo de enfermedad crónica (2 Cor. 12:7-10; Gál. 4:13); muchos creen que era una enfermedad relacionada con sus ojos, basando su conclusión en que generalmente dictaba sus cartas (2 Tes. 3:17), menciona que escribía con letra grande (Gál. 6:11) y dice que los creyentes de Galacia estaban dispuestos a arrancarse los ojos para dárselos, si hubiese sido posible (Gál. 4:15).
· Se han sugerido algunos otros males, pero la evidencia bíblica es insuficiente para saber con precisión cuál fue "la espina en la carne" de Pablo.
II. CONVERSIÓN Y LLAMAMIENTO DE PABLO
· ¿De qué manera Dios utilizo a Pablo como misionero? ¿Qué factores propiciaron la conversión y el llamamiento de Pablo? ¿Cuáles son las evidencias de una persona convertida? ¿De que manera podemos ser agentes de esperanza?
1. Primeros contactos con el cristianismo.
El primer contacto de Pablo con el cristianismo que se conoce tuvo relación con la muerte de Esteban. Algunos suponen que Pablo fue uno de los de Cilicia que, con otros, no pudo vencerlo en el debate (Hech. 6:9, 10; 21:39). Aparentemente no arrojó piedra alguna sobre Esteban, pero "consentía en su muerte" (Hech. 8:1) y cuidó la ropa de los testigos (Hech. 7:58). La acción de masas que resultó en el apedreamiento de Esteban señaló el comienzo del primer período de persecución que devastó a la iglesia naciente; y Pablo, según parece, se destacó en esta persecución. En un arranque de odio fanático contra los cristianos (Hech. 26:11), intensificado por una conciencia acusadora (Hech. 26:14), los arrancaba de las casas donde los encontraba y los arrojaba a la cárcel (Hech. 8:3); los castigaba en las sinagogas (Hech. 22:19; 26:11) y daba su consentimiento para su muerte (Hech. 22:4; 26:10). Pablo cumplió esta tarea primero en Jerusalén (Hech. 8:1, 3; 26:10), pero luego siguió a los creyentes esparcidos hasta otras ciudades y los "perseguía sobremanera" (Hech. 8:4; 26:11; Gál. 1:13).
Muro de la ciudad de Damasco, cerca del sitio de escape de Pablo de la ciudad. La hilada de mampostería más baja es muy antigua.
2. Su conversión.
En una de esas campañas de persecución el curso de la vida de Pablo cambió completa y espectacularmente. Al oír que había cristianos en Damasco, pidió cartas del sumo sacerdote -cartas de extradición- que lo autorizaran a arrestar y llevar a Jerusalén a cualquier cristiano que encontrase en dicha ciudad (Hech. 9:1, 2). Hay tres informes de la experiencia que tuvo en ese viaje (Hech. 9:1-9; 22: 4-11; 26:9-18); el primero está en tercera persona, los otros dos en primera persona (fueron contados por Pablo: uno a la multitud judía en Jerusalén; los otros, al rey Agripa y a su hermana Berenice). Mientras Pablo se acercaba a Damasco a mediodía con un grupo de hombres para ayudarlo en sus planes asesinos, lo rodeó una luz enceguecedora, más brillante que el Sol.
Pablo y sus compañeros cayeron a tierra (Hech. 26:14), y una voz, que se identificó como Jesús de Nazaret, le preguntó: "Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?", y añadió: "Dura cosa te es dar coces contra el aguijón". Abrumado por esta manifestación del Cielo, preguntó qué debía hacer. La voz le ordenó ser testigo para Cristo entre los gentiles (Hech. 26: 16, 17). Se le instruyó que entrara en Damasco, donde recibiría instrucción adicional. Entretanto, sus sorprendidos y atemorizados compañeros de viaje se habían levantado del suelo (Hech. 9:7), pero no entendían lo que pasaba, porque aunque veían la luz y oían la voz, no podían comprender lo que ella decía (Hech. 9:7; 22:9). Al incorporarse, Pablo descubrió que estaba ciego.
En esas condiciones, fue conducido por sus compañeros al hogar de un cierto Judas, en Damasco, donde estuvo tres días sin comer ni beber (Hech. 9:8, 9, 11). Mientras oraba, Jesús se le apareció en visión a un cristiano llamado Ananías y le indicó que fuera a la casa de Judas, en la calle llamada "la Derecha", donde encontraría a Pablo, quien había recibido una visión acerca de su visita. Ananías, con todo respeto, le recordó a Jesús las persecuciones de Saulo, pero se le informó que el anterior perseguidor había sido elegido por Dios (Hech.9: 11-16). Siguiendo las instrucciones, Ananías encontró a Saulo y al imponerle las manos recuperó la vista en forma inmediata, recibió el don del Espíritu Santo y fue bautizado (Hech. 9:17, 18). No se sabe cuánto tiempo permaneció en Damasco. El informe parece indicar que fue breve (Hech. 9:19). Sabemos que allí se asoció con los cristianos. También, en armonía con su carácter -y para asombro de quienes lo conocían- comenzó a predicar en las sinagogas al Cristo que había vilipendiado, pero que ahora adoraba (Hech. 9: 19-21). Tan poderosa y convincente era su predicación que ninguno podía derrotar su lógica o negar su poder (Hech. 9:22).
III. PREPARACIÓN Y COMIENZO DE LA MISION
· ¿Por qué Pablo se retiro después de una breve campaña de evangelización? ¿Un tiempo de aparente inactividad? Explique.
En el relato de Hechos se omite el siguiente acontecimiento de la vida de Pablo, pero él lo menciona en Gálatas: allí cuenta que después de su conversión y su primera breve campaña de evangelización, se fue a Arabia (Gál. 1:17) antes del viaje a Jerusalén (Hech. 9:26; Gál. 1:18). La región exacta identificada como Arabia es desconocida (aunque muy probablemente haya sido el país de los nabateos), y tampoco se sabe cuánto tiempo estuvo allí. Este período de retiro le dio tiempo para meditar acerca del gran cambio que había ocurrido en su vida, y la soledad le permitió reexaminar, con oración y cuidado, todo el fundamento de su nueva convicción a la luz de las Escrituras, y así afirmar para siempre su fe en Cristo y su evangelio.
Después de este tiempo de aparente inactividad, regresó otra vez a Damasco (Gál. 1:17), donde se retoma la narración de Hech. 9. Parece que reanudó la predicación en las sinagogas con el mismo resultado de antes (Hech. 9:22). En consecuencia, los judíos hicieron planes para asesinarle (Hech. 9: 23, 24). En este intento fueron apoyados por el gobernador de la ciudad, quien servía bajo el rey nabateo Aretas (2 Cor. 11:32, 33). Como éste gobernaba esa región, tal vez entre el 37 d.C. y c 54 d.C., el incidente debió haber ocurrido en algún momento dentro de ese período. Sin embargo, los soldados que vigilaban las puertas para impedir que escapara de la ciudad vieron frustrados sus propósitos, porque algunos creyentes bajaron a Pablo en una gran canasta desde una ventana de una casa construida sobre el muro, permitiéndole así escapar de sus enemigos (Hech. 9:25; 2 Cor. 11:33).
1. La visita a los apóstoles en Jerusalén
Habiéndosele terminado la oportunidad de trabajar en Damasco, Pablo se dirigió a Jerusalén. Ya habían pasado tres años desde su conversión, pero hasta entonces no había tenido contacto alguno con los dirigentes de la iglesia (Gál. 1:17, 18), hecho que más tarde ofreció como prueba de que su evangelio no se había originado con los discípulos de Cristo sino con Cristo mismo (Gál. 1:10-12; 1 Cor. 15:3-8). Su razón básica para ir allá era ver a Pedro (Gál. 1:18). Al llegar a la ciudad quiso unirse a Pedro y a los hermanos, pero pronto descubrió que tres años no habían sido tiempo suficiente para borrar el recuerdo de su persecución anterior, o para eliminar las dudas y las sospechas (Hech. 9:26). La situación fue resuelta por Bernabé, natural de Chipre, quien confió en el informe de Pablo acerca de su experiencia al contarlo a los demás en presencia del apóstol (Hech. 9: 27).
Pablo demostró que su experiencia era genuina al predicar a Jesús en la ciudad de Jerusalén. Su lógica incontrovertible despertó la ira de ciertos judíos helenistas que decidieron quitarle la vida (Hech. 9:29). En un informe posterior de su experiencia (Hech. 22:17-21), contó cómo Dios le había aparecido en visión en el templo y, a pesar de sus protestas, le indicó que saliera de Jerusalén, porque los judíos no recibirían su mensaje, y que sería enviado a los gentiles. Sus hermanos de inmediato lo acompañaron al puerto de Cesarea (Hech. 9:30), a unos 85 km al noroeste de Jerusalén. Probablemente lo pusieron a bordo de un barco para asegurarse de que escaparía de sus enemigos.
2. En las regiones de Siria y Cilicia, y en Antioquía.
De Jerusalén, donde había estado 15 días (Gál. 1:18), Pablo fue "a las regiones de Siria y de Cilicia" (Gál 1: 21). Sus actividades durante los siguientes años no aparecen en las Escrituras. Bien podemos imaginar que estuvo activo en el ministerio en Tarso y las regiones circundantes (Hech. 11:25; Gál. 1:21-23). Habría sido durante este período que tuvo las visiones referidas en 2 Cor. 12:2-4, que, según el verso 2, vio 14 años antes de escribir 2 Corintios. Esta epístola fue redactada en el año 57 d.C., lo que apuntaría al año 43 como la fecha de la visión. Pablo estuvo en Tarso o las regiones vecinas desde el 38 hasta el 44.
Mientras estuvo en Cilicia, el cristianismo avanzó en otras áreas. Un interés creciente había surgido en Antioquía de Siria, y Bernabé fue enviado desde Jerusalén para desarrollarlo (Hech. 11:19-24). Como vio que necesitaba ayuda, viajó a Tarso, encontró a Pablo y lo llevó consigo a Antioquía (Hech. 11:25, 26). Pablo y Bernabé trabajaron juntos por un año entero, con éxito notable. Mientras estaban en Antioquía, vinieron de Jerusalén ciertas personas con don profético (Hech. 11:27). Uno de ellos, Agabo, fue inspirado divinamente para predecir una hambruna mundial (Hech. 11:28). Como resultado, los creyentes de Antioquía decidieron enviar ayuda a los cristianos de Judea, y para ello eligieron a Pablo y Bernabé (Hech. 11: 29, 30). Habiendo cumplido su misión, regresaron a Antioquía trayendo consigo a Juan Marcos, sobrino de Bernabé (Hech. 12:25; Col. 4:10).
IV. LOS VIAJES MISIONEROS DE PABLO
· ¿Por qué Pablo fue un misionero extraordinario?¿Cómo puede alguien llegar a ser un misionero excepcional?¿Eres un misionero altamente calificado y aprobado por el Señor Jesús?¿Qué es lo más importante en la vida?¿En qué te apoyas al compartir tu testimonio con los demás?¿En qué te basas al estudiar la Biblia con un nuevo converso?¿Estás viviendo la vida de Cristo?¿Estás experimentando su poder?¿Has utilizado tus talentos o habilidades para cumplir la tarea de la predicación del evangelio?
Mientras estaba en Antioquía por segunda vez, Pablo recibió un llamado que lo inició en sus grandes viajes misioneros hacia el Asia Menor y Europa, lo que le significó el título de "apóstol a los gentiles". Cuando algunos de los miembros de la iglesia estaban "ministrando... al Señor, y ayunando", recibieron del Espíritu Santo la orden de apartar a Pablo y a Bernabé para una obra especial (Hech. 13:2). Así lo hicieron, con ayuno y oración; y luego, dirigidos por el Espíritu Santo, los apóstoles salieron para su primer viaje misionero, acompañados por Juan Marcos (Hech. 13:3, 5).
1. Primer viaje misionero.
· ¿Qué lugares predicó el apóstol Pablo en su primer viaje misionero? ¿Quiénes fueron sus acompañantes? ¿Cuáles fueron los resultados? ¿De qué manera Dios dirigió los pasos de Pablo? ¿Has experimentado la presencia de Dios en el trabajo misionero?
Fueron a Seleucia, el puerto de Antioquía, a unos 25,5 km de la ciudad, y allí tomaron un barco para Chipre (Hech. 13:4).
(1) Chipre
Desembarcaron en Salamina, en la costa oriental de la isla, y comenzaron a predicar en las sinagogas judías (Hech. 13:5) como era la costumbre de Pablo (Hech. 9:20; 17:1, 2; 18:4). Luego atravesaron Chipre de este a oeste y llegaron a la ciudad de Pafos (Hech. 13:6), sede del procónsul o gobernador romano de la isla, Sergio Paulo, un hombre prudente y de discernimiento (Hech. 13:7), a quien frecuentaba un judío de nombre Barjesús o Elimas, que era un charlatán y mago (Hech. 13: 6...